sábado, 28 de noviembre de 2009

El diablo y Daniel Johnston

The devil and Daniel Johnston es uno de los documentales musicales que más me han llamado la atención y emocionado en los últimos años. El loco incomprensible y el genio incomprendido caminan juntos de la mano en la figura de un adolescente maniaco-depresivo con trastornos bipolares, Danny Johnston, cuyos mayores sueños son la música y los cómics. No cesará en el empeño de salir en la MTV y conseguir la fama, aunque para ello tenga que vender el alma al diablo. Éste y otros personajes de su imaginario demente (como el Capitán America o Casper el fantasma amistoso) configuran su propio mundo. The devil and Daniel Johnston es una historia de ilusiones y de locura, de anhelos y amores insatisfechos, abordada con un tacto humano exquisito. Una delicia de película.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Cita con Lewis Carroll

"¡Qué pobre memoria es aquella que sólo funciona hacia atrás!"

domingo, 22 de noviembre de 2009

Cuatro años

De izquierda a derecha: Miguel Serrano Larraz, Miguel Ángel Ortiz Albero,
Nacho Tajahuerce, Carmen Ruiz Fleta y yo. Pintura de Brenda Ascoz.


BURNED CHILDREN OF OREGON
(Un relato de Miguel Serrano Larraz)

Decidimos irnos a cenar para celebrarlo. Nos pusimos todos muy contentos, menos el Ángel, que quería madrugar para llevar a su madre al médico. Lo convencimos con argumentos irrebatibles: nos moderaríamos, beberíamos agua mineral, volveríamos pronto a casa.

Además, el tiempo de la cena lo tenía que perder de cualquier forma.

Accedió a acompañarnos, un poco a regañadientes. Nos dirigimos hacia la Peña cantando, y subimos los escalones de dos en dos. En la Peña, aunque nosotros no lo sabíamos, habían preparado una fiesta. Pedimos vino para todos, nos quitamos los abrigos, brindamos. Después comenzaron las actuaciones. Miguel Ángel leyó un poema de Miguel, Miguel representó un collage de Miguel Ángel (haciendo a la vez el papel de Muerte y el de Mujer Hermosa), Vicente introdujo su nuevo número musical, Nacho lo filmó todo para poder demostrarlo, Pedro cerró las esferas y selló el pacto con el salto del tigre. Comimos sopa de langostino, espárragos rellenos de bogavante, jamón de York pasado por la sartén y un cubo de pastel de la casa. En algún momento nos pareció oportuno ir a ver a Manolo para que nos contara unos chistes, pero el Ángel se negó a acompañarnos. Tengo que levantarme pronto para presentar la declaración de la renta, dijo. Tuvimos que agarrarlo por los sobacos para que no huyera, y lo arrastramos a casa de Manolo, donde lo obligamos a beberse dos morteros. Cuando por fin logró desatarse, no hizo falta más violencia. Él mismo pidió la tercera ronda de morteros, la cuarta, la quinta. Qué felices éramos.

Se apagaron las luces y no quedaba más remedio que marcharse. Hicimos las deliberaciones y creímos que lo mejor era acercarnos a ver a Sergio y a Ana. El Ángel se resistió. Mañana tengo que arreglar un enchufe, dijo. Tengo que buscar trabajo. Tengo que hacer la colada. La última, le dijimos, sólo la última, y vino. En el camino jugamos a fútbol con una bolsa de plástico, Nachó se subió a un sofá. Sergio saltó de alegría al vernos entrar, Ana se había puesto el disfraz de china y los cubitos de hielo. Descorchamos el champán. Fue entonces cuando el Ángel se puso a insultar desde el balcón a la gente que pasaba por la calle, y todos reímos. Algunos transeúntes se indignaban, pero otros preguntaban si podían subir y se unían a la fiesta. Subieron dos arquitectos, un capitán de barco, un grupo de abogadas que celebraba la despedida de soltera de una de ellas. El Ángel los insultó a todos, rigurosamente. Poco después comenzó el incendio. Alguien ha dicho que hubo un único foco, en la pierna izquierda, pero yo sé que no es cierto, que ardió todo a la vez: las dos piernas, los brazos, el pecho, los dientes. El Ángel se iluminó en apenas unos segundos, con su copa de champán en la mano, detenido, y no gritaba. Las llamas alcanzaron el techo, rojas y azules, y nosotros lo vimos consumirse. Lo perdimos, pero fue hermoso verlo arder, todos a su alrededor, conteniendo la respiración mientras él se quemaba, se quemaba, se quemaba.

viernes, 20 de noviembre de 2009

"Ne dis rien", una canción de Serge Gainsbourg




SERGE GAINSBOURG/ANNA KARINA - ne dis rien


Un verdadero icono. Un gran provocador capaz de espetarle en directo y en televisión "Quiero follar contigo" a una remilgada Whitney Houston. Un gamberro capaz de poner pedos como única letra a un reggae ("Evguénie Sokolov"). Un seductor. Un bebedor. Un fumador empedernido: "Mi vida es un triángulo de alcohol, Gitanes y mujeres", afirmaba él.


Pero, sobre todo, Gainsbourg el gran compositor de canciones que marcaron una época. Y no sólo en lo musical. ¿Por qué no están traducidas las letras de sus canciones en España de una manera decente? Sin duda porque es tarea imposible. Serge era un letrista que jugaba con la sonoridad y las onomatopeyas de las palabras, con el doble (triple) sentido de las frases.


Hoy rescato de su discografía "Ne dis rien", haciendo pareja con Anna Karina. Pero, sin duda, Gainsbourg se hizo mundialmente conocido por "jadear obscenamente" junto a Jane Birkin en "Je t'aime... moi non plus". La prensa, naturalmente, conjeturó que Serge y Jane habían grabado un acto sexual en directo con una grabadora oculta bajo la cama. Serge respondió: "Menos mal que no fue así, si no nos habría salido un elepé".


La vida de Lucien Ginsgurg (aka Serge Gainsbourg) se lleva a las pantallas de la mano del dibujante de comic Joann Sfar. Eric Elmosnino será Gainsbourg, Lucy Gordon interpretará a Jane Birkin y Laetitia Casta a Brigitt Bardot. Espero que este biopic llegue a estrenarse en España.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Un poema de Gabriel Ferrater


SI PUEDO

Alguna cosa ha entrado
en un poema que sé
que he de escribir, y no sé
cuándo, cómo o qué
querrá decir. Si puedo
lo encaminaré a ti.
Que hable de tus cabellos,
de la escama de sol
que tiembla en esta uña.
Pero acaso no siempre
tenga del todo en cuenta
lo que ahora veo en ti.
He oído el ruido oscuro
de algo que se me cae
a un pozo. Cuando flote,
¿sabré reconocer
que viene de este instante?



Eclipsado en la Generación de los 50 por Jaime Gil de Biedma, Gabriel Ferrater siempre me ha interesado más que el primero. Las mujeres y los días (título que, dicho sea de paso, también inspiró una algoriana canción de La Costa Brava) reúne su obra poética completa, llena de autobiografía íntima, amor y memoria. Este poema, traducido del catalán por Luis Alberto de Cuenca, es una clara muestra de ello.

Temeroso de envejecer, Ferrater había fijado como límite de su vida los cincuenta años. Lo cumplió. Tres semanas antes de cumplir esa fecha, ingiere barbitúricos y se ata una bolsa de plástico alrededor de la cabeza.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Fundido en portugués

Luís Parrado y Diogo Vaz Pinto, poetas y artífices de la revista literaria "Criatura", durante varios meses han traducido a la lengua de Pessoa muchos de mis poemas de Fundido en negro. Han realizado un trabajo magnífico y, desde aquí, les doy las gracias. Me gusta cómo quedan mis poemas en portugués. El portugués es la lengua de la saudade, de la melancolía (esa alegría, autocomplaciente y mesurada, de estar triste). Menos mal que nos queda Portugal. En las retinas de la memoria. Y en el corazón, claro.

No me resisto a mostrar uno de los poemas traducidos por Diogo Vaz Pinto, que presumiblemente aparecerá en diciembre en el nº 4 de la lisboeta revista "Criatura":



O LAMENTO DE QU YUAN

Confusão é uma palavra que inventámos
para uma ordem que não se entende.

Henry Miller


Sopraste nas minhas feridas e estas despegaram-se de mim.
Estendidas no vento, circulando por vales e verões,
ainda ternas, foram aderindo à casca de uma árvore,
pousaram sobre o lago, abriram veias noutros corpos.
Acamado, hoje o mundo na sua língua diz mal de nós:
o bosque perde pássaros, a água foge da água
e a manhã é uma mula carregando sacos rotos.
E assim, cada coisa é uma hemorragia, cada coisa está fora
de cada coisa, é todas as outras menos ela mesma.

Mulher que velas os amotinados limites do meu corpo:
Nunca apagues com a tua boca a boca de um mistério.
A verdade é uma fenda que abre uma rota direita ao abismo.
A contradição um país secreto de que sempre se regressa
com um beijo nas costas e uma punhalada nos lábios.




EL LAMENTO DE QU YUAN

Soplaste en mis heridas y éstas se despegaron de mí.
Acostadas en el viento, rodando por valles y veranos,
tiernas aún, fueron a adherirse a la corteza de un árbol,
se posaron en el lago, echaron venas en otros cuerpos.
Encamado, hoy el mundo en su lengua nos maldice:
el bosque pierde pájaros, el agua escapa del agua
y el mañana es una mula que carga con sacos rotos.
Y así, cada cosa es una hemorragia, cada cosa está fuera
de cada cosa, es todas las demás menos ella misma.

Mujer que velas los amotinados límites de mi cuerpo:
Nunca borres con tu boca la boca de un misterio.
La verdad es una grieta que abre una ruta hacia el abismo.
La contradicción un país secreto del que siempre se regresa
con un beso en la espalda y una puñalada en los labios.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Obra de Joel-Peter Witkin

Las meninas, según Joel-Peter Witkin

Según el propio Witkin (Nueva York, 1939), su peculiar visión y sensibilidad artísticas provienen de un episodio que presenció en su infancia: un accidente automovilístico en el que una niña resultó decapitada.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Cita con Marie de Rabutin-Chantal, Marquesa de Sévigné

"Si los hombres han nacido con dos ojos, dos orejas y una sola lengua es porque se debe escuchar y mirar dos veces antes de hablar."

domingo, 1 de noviembre de 2009

"Ave, Lúcifer", una canción de Os Mutantes

Armando, Sérgio y Rita formaron en 1966, y en Sao Paulo, la banda Os Mutantes. Al principio tuvieron un éxito limitado en su país, pero voces como las de Kurt Cobain, Beck, David Byrne y Kevin Barnes (vocalista de Of Montreal) se encargaron más tarde de reivindicar este legado de tropicalismo, psicodelia y rock progresivo que ha terminado por convertirles en una banda de referencia a nivel mundial.

Entre muchas canciones de Os Mutantes, me entusiasma "Ave, Lúcifer", un tema totalmente hedonista, celebratorio y pleno de una lánguida psicodelia. Tanto me gusta que acabó como título y asunto de un poema mío de Fundido en negro (DVD Poesía, 2007).